Los taxistas insisten a la Comunidad de Madrid que la movilidad no se puede convertir en una selva ante la insuficiencia de medios inspectores
Madrid, 3 de abril de 2018.- FEDETAXI ha denunciado ayer el Servicio ALSACab que ALSA, en manos ahora de una multinacional holandesa, ha anunciado que pretende poner en marcha en Madrid para traslados de coche compartido dentro de la M-30 con origen o destino en una estación de autobuses de largo recorrido.
El servicio supone compartir un coche con venta de billete por plazas para hacer la última milla al autobús de una línea de transporte de viajeros. La venta por plaza en vehículos de menos de 9 pasajeros está prohibida a nivel estatal y también en la Comunidad de Madrid.
No obstante, FEDETAXI ha sido recientemente la impulsora de una reforma reglamentaria a la que la propia presidenta regional, Cristina Cifuentes, se comprometió para esta legislatura a fin de que se permita compartir taxis y el coste del trayecto para realizar traslados de ámbito urbano, bajo el sistema denominado carpooling.
Si bien el servicio ALSACab aún no está amparado por esa norma, tampoco quedará amparado, a juicio de FEDETAXI, mientras se realice con VTCs en vez de taxis. Cada viaje constituye una infracción de la normativa de transporte que impide a los turismos el cobro por plaza individual o asiento que está sancionado con más de 1.000 euros a la empresa y que también podría suponer multas entre 200 y 400 para los usuarios que sean detectados participando en este tipo de servicios.
Además FEDETAXI a través de su asociación miembro, Asociación Gremial de Auto-Taxi de Madrid, también se pondrá en contacto con el Ayuntamiento de Madrid para requerir del mismo modo que utilice los medios disciplinarios y de control a su alcance para evitar la transgresión de la ley por parte de la multinacional holandesa ALSA.
“ALSA no puede tener derecho de pernada alguno y debe respetar la normativa vigente y esperar como cualquier otra empresa a que se legalicen los servicios de taxi compartido”, señala Miguel Ángel Leal, presidente de FEDETAXI, quien también advierte que “no es de recibo que la movilidad se esté convirtiendo en una selva en la que las multinacionales estén ofertando servicios no amparados por la ley, intentando desbordar a los cuerpos de inspectores de la Comunidad de Madrid”.
De este modo, “si nadie respeta las leyes, no podrán reprochar que los taxistas tomemos medidas de índole particular”, se mostró tajante.
La organización representativa de los taxistas españoles ha recordado en su denuncia que la regulación estatal de las VTC impide que se puedan prestar servicios de venta por plazas, y no existe ningún proyecto de norma en otro sentido.
Mientras, el taxi compartido es competencia de autonomías y municipios y será una realidad antes de 2019, haciendo hincapié en que las VTC no son complemento del transporte colectivo, pero sí los taxis. Por ello, nada impide que estos servicios se lleguen a prestar dentro del ámbito del servicio público en beneficio universal de todos los usuarios y no solo para los de determinadas empresas de autobuses.
A este respecto, el presidente de FEDETAXI ha remarcado que “venimos insistiendo en que debe revisarse el marco legal de la movilidad pero en beneficio de los servicios públicos y no de multinacionales que pretenden privatizar la movilidad y el ‘big data’ que generamos todos los ciudadanos para hacer negocio con bienes públicos”.
En ese sentido, ha reiterado al Ministro de Fomento que urge convocar la conferencia sectorial de transportes para tomar medidas coordinadas y abrir “un Libro Blanco de la Movilidad donde se garanticen los derechos de los usuarios y de miles de trabajadores autónomos del taxi y otros sectores que las multinacionales vienen a arruinar sin contrapartida alguna”.