Esta muestra, organizada por la Fundación Camino Lebaniego dentro de las VI Jornadas Internacionales de la Cultura de los Graneros Elevados Tradicionales, podrá visitarse hasta el mes de diciembre en el Centro de Visitantes de Sotama

Fotografía: Turismo de Cantabria
Santander- 21.09.2025. La inauguración de la exposición ‘El hórreo en los Caminos del Norte’ dio el pistoletazo de salida este viernes a las VI Jornadas Internacionales de la Cultura de los Graneros Elevados Tradicionales (popularmente conocidos como hórreos), piezas clave del patrimonio rural y símbolo de identidad cultural en el norte peninsular. Durante tres días, del 19 al 21 de septiembre, Liébana acoge unas jornadas en las que especialistas internacionales, investigadores y vecinos compartirán conocimientos, experiencias y relatos en torno a estas construcciones tradicionales que han acompañado la vida campesina durante siglos.
Este evento coincide con el inicio del expediente, por parte del Ministerio de Cultura, para que los hórreos del norte de España (Cantabria, Asturias, Galicia, León, Navarra y País Vasco) sean declarados Manifestación Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial, al considerar que este tipo de construcciones son portadoras de un capital simbólico de primer orden, al vehicular sentido de pertenencia durante generaciones.
Durante la inauguración, la directora de la Fundación Camino Lebaniego, Pilar G. Bahamonde, destacó la relación entre los caminos de peregrinación y estas construcciones. «Los caminos de peregrinación son eminentemente rurales, el pulmón de la identidad de nuestra sociedad es lo rural y el hórreo es un gran ejemplo de esta cultura y de esta identidad». También estuvieron presentes el presidente de la Red Internacional Horrea de Graneros Elevados Tradicionales, Carlos Henrique Fernández Coto; el presidente de AMHOCAN (Asociación Amigos del Hórreo Cántabro), José Francisco Fernández Silió, y el codirector del Parque Nacional de Picos de Europa por Cantabria, Jesús Celada.
Esta muestra viaja por los orígenes del hórreo desde la época romana, destacando su importancia en el norte de España y con un apartado especial a este tipo de estructuras en Cantabria. La exposición, enmarcada en el X Aniversario de los Caminos del Norte como Patrimonio de la Humanidad, recoge también los trabajos de recuperación de los hórreos de Anievas y Avellanedo y exhibe varias maquetas originales, entre ellas, una procedente también de Portugal. La inauguración se completó con una charla sobre la relación entre los hórreos y los caminos de peregrinación como el Lebaniego y el de Santiago a cargo de Carlos Regueira, profesor e investigador y autor del Atlas del Hórreo en Galicia; y Anselmo Reguera, de la Asociación de Amigos de los Hórreos Leoneses.
Programa para hoy domingo
Este domingo 21 de septiembre el público podrá disfrutar de una ruta por graneros elevados tradicionales de Liébana, con salida desde el Centro de Estudios Lebaniegos, y de la inauguración del hórreo rehabilitado en Avellanedo (Pesaguero) con la colaboración de varios miembros de Tentemoz@s, un proyecto en el que jóvenes con diversidad funcional realizan visitas guiadas al patrimonio etnográfico en zonas rurales. También contará con la presencia de la directora general de Cultura y Patrimonio Histórico del Gobierno de Cantabria, Eva Guillermina Fernández; el director general de Patrimonio Cultural del Gobierno del Principado de Asturias, Pablo León; el alcalde de Pesaguero, Enrique Sabarís; y la directora de la Fundación Camino Lebaniego, Pilar G. Bahamonde.
Estas Jornadas se realizan en colaboración con la red Hórrea y la Asociación de Amigos del Hórreo Asturiano, AMHOCAN (Asociación de Amigos del Hórreo Cántabro), el Ayuntamiento de Pesaguero, Apatrigal (Asociación para la Defensa del Patrimonio Cultural Gallego) y Amigos de los Hórreos Leoneses. Con ellas, la Fundación Camino Lebaniego refuerza su misión de proteger y difundir el patrimonio ligado a los caminos de peregrinación, fomentando la investigación, la participación ciudadana y el diálogo intercultural. Los hórreos, presentes en estas rutas históricas, no solo representan una tradición arquitectónica singular, sino también una forma de entender la relación entre paisaje, sociedad y memoria colectiva.





