La feria se celebra en el marco del día de San Simón y San Judas que se celebra el 28 de octubre, recuperando y actualizando una larga historia de intercambios comerciales que se remonta a más de nueve siglos.
La localidad de Sahagún acoge los próximos 24, 25 y 26 de octubre la 52 edición de la Feria del Puerro San Simón, una cita que, más allá de su carácter gastronómico y popular, rinde homenaje a la rica tradición agrícola de la villa y a sus profundas raíces históricas.
La feria se celebra en el marco del día de San Simón y San Judas (28 de octubre), recuperando y actualizando una larga historia de intercambios comerciales que se remonta a más de nueve siglos. Sahagún cuenta con día de mercado documentado desde el año 1093, durante el reinado de Alfonso VI, y fue reconocida como villa ferial gracias a la concesión de feria franca otorgada por Alfonso VII en 1155. Estos privilegios consolidaron a Sahagún como un núcleo comercial de referencia en la Edad Media.
Una feria con sabor a historia
La Feria del Puerro se articula como una continuidad de esa vocación ferial y un homenaje a los hortelanos —cada vez más escasos— que durante generaciones han cultivado la tierra en la comarca. El protagonista es el puerro, una hortaliza introducida en la zona por los monjes cluniacenses que llegaron de Francia y que encontraron en el clima y la tierra de Sahagún un lugar idóneo para su cultivo.
No faltará en la feria el recuerdo a otros productos que marcaron época, como los pavos, cuya compraventa fue una tradición muy arraigada en las ferias sahaguninas de antaño.
Durante los tres días, se podrá disfrutar de un mercado agroalimentario y artesanal, degustaciones gastronómicas, talleres, actividades para niños, actuaciones musicales y un ambiente festivo que busca poner en valor el patrimonio cultural, agrícola y humano de la villa.
Una cita para todos los públicos
Organizada por el Ayuntamiento de Sahagún con la colaboración de asociaciones locales y productores de la zona, la Feria del Puerro San Simón invita a vecinos, visitantes y curiosos a disfrutar de una experiencia única en un enclave histórico del Camino de Santiago.
Porque en Sahagún, la historia sigue viva… y se saborea.
