En la Real Abadía de San Isidoro de León se celebró la entrega del Premio Hermann Künig de la Hospitalidad 2025 a la organización de Hospitaleros voluntarios, acto que constituyó una auténtica fiesta de la Hospitalidad.
El evento se celebró en la sala del Pendón, con presencia de notables representaciones del mundo del peregrinaje procedentes de diversas regiones españolas, junto con autoridades leonesas y de la comunidad de Castilla y León; encuentro coordinado por el periodista Andrés Berlanga. En el mismo participó también el grupo Scherztrio León, integrado por Noelia Díez (piano), Laura Carbajo (violín) y Claudia García (flauta), que ofreció un recital de música como cierre del evento.

Tomás Álvarez, presidente de la Asociación de Amigos del Camino de Künig, entidad convocante de este premio, dio la bienvenida a los asistentes, y agradeció la colaboración de numerosas personas en la creación del galardón, cuyo objetivo el de “proclamar a toda la sociedad el valor de la hospitalidad, realzar su práctica y contribuir a ello, destacando ejecutorias ejemplares tanto de personas físicas como jurídicas”.
Señaló que entre los candidatos propuestos para el galardón en esta primera convocatoria, el Jurado destacó desde un principio el mérito de la Organización de Hospitaleros Voluntarios, con “más de 30 años de acogida, aglutinando a más de 10.000 personas procedentes de todos los continentes practicando de forma altruista y gratuita la hospitalidad tradicional jacobea, en decenas de albergues a donativo”.
“Este año -recordó- podemos encontrar hospitaleros voluntarios en albergues del País Vasco, de Navarra, La Rioja, León, Castilla, Andalucía, Aragón y Extremadura, entregando su tiempo y su tarea para facilitar el peregrinaje por los caminos santiagueños”.
Finalmente agradeció la presencia de los asistentes porque -con la labor de unos y la presencia de todos- se está “dando relevancia a la organización premiada, por lo que tiene de ejemplar para la sociedad”.
Seguidamente, el secretario de actas del Jurado, Apolinar Fernández Franco leyó el acta de las deliberaciones del mismo -reunido el pasado 18 de junio- que acordó otorgar galardón a la organización Hospitaleros Voluntarios.
Tras la lectura, el director General de Turismo y Comisario de los Caminos de Santiago en la Comunidad de Castilla y León, Ángel González Pieras, procedió a entregar al coordinador de la organización galardonada, Manuel Oliva, la terracota del premio, obra de la ceramista Marta Rivera.
Esta terracota representa a un peregrino medieval que avanza hacia la meta compostelana. La escena está inspirada en un grabado de una edición de la guía de Künig de 1521.
Por su parte, Tomás Álvarez entregó a su vez a Manuel Oliva el diploma conmemorativo. En él se puede leer que la tarea de Hospitaleros Voluntarios “merece ser destacada tanto por su identificación con un valor esencial del peregrinaje, el de la hospitalidad, como por su carácter ejemplarizante, especialmente en unos momentos como los actuales, cuando se percibe por todo el Orbe una creciente falta de solidaridad y humanidad para con el otro”.
Manuel Oliva valoró el premio como el reconocimiento global a una obra llevada a cabo desde hace más de tres décadas, impulsada por José Ignacio Diez, primer director de la revista Peregrino, y también primer coordinador de los hospitaleros voluntarios. Una labor que continúa ahora con centenares de hospitaleros atendiendo a centros de atención al peregrino de los diversos caminos.
En el mismo sentido fue la intervención de Juan Guerrero Gil, presidente de la Federación de Asociaciones del Camino de Santiago, entidad desde la que se creó la organización de Hospitaleros Voluntarios.
Juan Guerrero, destacó asimismo importantes tareas de la Federación, desde la que se impulsan iniciativas como la publicación la revista Peregrino, la actualización de la cartografía jacobea, y en especial el apoyo a Hospitaleros Voluntarios, “una organización de la todos que se sienten especialmente orgullosos”, según expresó.
Cerró las intervenciones el director el director General de Turismo y Comisario de los Caminos de Santiago en la Comunidad de Castilla y León, Ángel González Pieras. Destacó el valor del texto de Künig, de 1495, que por primera vez hace una guía en la que cuenta lo que necesita el viajero para hacer el recorrido; informándole de los caminos, las monedas, el trato en los hospitales o los lugares donde podía recibir vino y pan.
Señaló la fortuna de que este texto tuviera para Castilla y León una información sumamente valiosa, como la referencia a las vía de peregrinación que unían Bayona con Burgos y la que avanzaba desde León, por Santa Marina del Rey, en dirección a Ponferrada.
El señor González Pieras que recordó también la trascendencia del valor de la hospitalidad en la cultura de Occidente, y recordó que en la actualidad el Gobierno de España, en colaboración de la Junta de Castilla y León, tramita la consideración de la “Acogida Jacobea” como manifestación a incluir en el Patrimonio Cultural Inmaterial ante la Unesco. Asimismo, destacó la oportunidad del nacimiento del Premio, una iniciativa en pro de los valores humanos de la peregrinación, en un momento en el que también han crecido en la sociedad posicionamientos de insolidaridad y xenofobia
A lo largo de las intervenciones asomó una y otra vez el valor de la hospitalidad y del Camino, con la mirada de los escritos clásicos, como la Odisea o el Quijote, a los versos de poetas modernos entre vellos Antonio Machado, especialmente recordado a través de la música, cuando los asistentes escucharon la magnífica versión que hizo el grupo Scherztrio León de la canción inmortalizada por Serrat en la que se recuerda al caminante que “se hace camino al andar”.
Con posterioridad al evento celebrado en la Sala del Pendón, antiguo refectorio de la Abadía, los representantes de la organizaciones del Camino, autoridades y miembros del Jurado, visitaron detenidamente en Museo de San Isidoro, uno de los grandes centros de arte y cultura a de Europa, remodelado en los últimos años por una iniciativa en la que se implicó la Fundación Montemadrid, en colaboración con el Cabildo de la Real Colegiata de San Isidoro.





