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El Museo Sorolla inicia la celebración del centenario del pintor con la incorporación de tres pinturas inéditas adquiridas por el Ministerio de Cultura y Deporte

‘En la posada’, ‘La esclava y la paloma. Desnudo’ y ‘El oferente’, pertenecientes al periodo de formación del artista, se han comprado para las colecciones públicas estatales por un total de 357.000 euros. El público podrá contemplarlas en la exposición ‘Sorolla. Orígenes’, que se ha inaugurado este pasado 19 de diciembre

museo sorollamuseo sorollaEl Museo Sorolla, museo de titularidad estatal dependiente del Ministerio de Cultura y Deporte, incorpora a su colección estable tres obras inéditas de un joven Joaquín Sorolla y Bastida (1863-1923), a escasos días del arranque del nutrido programa del Año Sorolla 2023, la conmemoración del primer centenario de la muerte del pintor.

Se trata de un conjunto de tres pinturas de gran calidad y perfecto estado de conservación tituladas ‘En la posada’, ‘La esclava y la paloma. Desnudo’ y ‘El oferente’. Ejecutadas todas ellas en 1883 cuando Sorolla contaba tan solo con 20 años de edad, son un excelente ejemplo de la pintura de su primera etapa. El periodo de formación resulta bastante desconocido para el gran público ya que la mayoría de estas obras se encuentran en colecciones privadas.

museo sorollaEstas adquisiciones, por un valor total de 357.000 euros, han sido realizadas por el Ministerio de Cultura y Deporte, a través de la Dirección General de Patrimonio Cultural y Bellas Artes, previa propuesta favorable de la Junta de Calificación, Valoración y Exportación de Bienes del Patrimonio Histórico Español. Compradas para las colecciones públicas estatales a través de la modalidad de oferta de venta directa, han sido depositadas y asignadas a la colección estable del Museo Sorolla en los últimos meses, junto a otras obras enmarcadas también en la primera etapa de Sorolla como son el lienzo ‘Niña cantora’ (1883) o la acuarela ‘Tocando la guitarra’ (1887).

En puertas del Año Sorolla 2023, estas adquisiciones cobran una gran relevancia y responden a la actual política de adquisiciones del Museo Sorolla, centrada en cubrir lagunas históricas y temáticas existentes de su colección estable, como es el caso de la pintura de primera etapa del joven pintor.

El año 1883 fue especialmente significativo para Sorolla al empezar a obtener sus primeros éxitos tras la Exposición Regional de Valencia. De hecho, dos de las obras adquiridas, que forman pareja, ‘La esclava y la paloma. Desnudo’ y ‘El oferente’, se expusieron en dicha muestra como ‘Dos estudios de desnudo’.

La primera tiene unas dimensiones de 148 x 86,5 centímetros, y ha sido adquirida por 160.000 euros mediante oferta de venta directa en colección particular. Y la segunda, de 149 x 99 centímetros, se ha comprado por un total de 142.000 euros mediante la misma vía.

Con firma y rúbrica, ambos lienzos constituyen ejemplos sobresalientes de los ejercicios académicos de formación que Sorolla dominaba ya plenamente. A través de su temática de inspiración pompeyana, demuestran el dominio de los conocimientos clásicos de Sorolla, a la vez que anticipan la enorme soltura del ‘maestro de la luz’ con el blanco.

Asimismo, ‘En la posada’ (1883) es un óleo sobre tabla de 27,4 x 17 centímetros, adquirido por valor de 50.000 euros. Firmado y dedicado, constituye uno de los escasos ejemplos de escenas inspiradas en la pintura de casacón de Mariano Fortuny y del maestro de Sorolla, Francisco Domingo Marqués. Ambientada en un interior barroco, destaca por su técnica precisa, colorista y brillante que permitió al joven pintor practicar una nueva aproximación al natural y a la captación de la luz a partir de la cuales forjaría su carrera artística.

Las obras han sido examinadas por expertos previamente y están incluidas en el catálogo razonado de la obra del pintor que su bisnieta, Blanca Pons-Sorolla, se encuentra ultimando.

Las tres obras están expuestas por vez primera en la exposición temporal que da el pistoletazo de salida al centenario de Sorolla, titulada ‘Sorolla. Orígenes’, que se ha inaugurado este pasado 19 de diciembre.

Exposición ‘Sorolla. Orígenes

El Museo Sorolla y la Fundación Museo Sorolla presentan la exposición temporal Sorolla. Orígenes. La muestra explora, por primera vez, el camino que condujo al valenciano Joaquín Sorolla Bastida a convertirse en el pintor de mayor éxito nacional e internacional de la España de entre siglos, en el pintor inmortal de la luz y del Mediterráneo que sigue hoy cautivando al público que contempla su pintura.

Sorolla. OrígenesUna exposición necesaria, que arroja luz y verdad sobre los inicios del pintor en su Valencia natal, sobre su formación en las Escuelas de Artesanos y en la Real Academia de Bellas Artes de San Carlos, que nos habla de un joven que compagina las clases de dibujo con el trabajo en el taller de cerrajería de su tío José y que va abriéndose camino hacia el éxito con trabajo y mucho esfuerzo.

Organizada en colaboración con el Museo de Bellas Artes de Valencia, donde luego se exhibirá. Sorolla. Orígenes abre la programación cultural de la conmemoración del centenario del fallecimiento de Joaquín Sorolla y Bastida que se celebrará a lo largo de 2023 y 2024.

La exposición ha sido comisariada por el conservador del Museo Sorolla Luis Alberto Pérez Velarde, quien ha realizado un minucioso trabajo de investigación para iluminar los momentos iniciales de la vida del pintor. Orígenes termina donde se inicia la carrera que todos conocemos de él. Nos revela un «Sorolla antes de Sorolla». Es por tanto una muestra muy novedosa, en la que la mayoría de las obras son inéditas para el público y que incorpora un nuevo cuadro al catálogo razonado del pintor.

Una exposición que nos permitirá profundizar, un poco más, en el conocimiento del genial pintor valenciano en el año en que se conmemora su primer centenario.

 

El Museo Nacional del Prado rinde homenaje a Joaquín Sorolla a través de sus retratos

En el centenario de su fallecimiento en 2023. Este homenaje a Sorolla congrega en la sala 60 del edificio Villanueva, dedicada a la Presentación de Colecciones del Siglo XIX, una selección de los retratos del artista que conserva el Museo del Prado. La exposición, que se podrá visitar hasta el 18 de junio de 2023, se completa con las obras que forman parte de la colección permanente en la sala 60 A, aneja a esta, y en la 62 A, que reúne los retratos de artistas del siglo XIX, entre ellos cuatro pintados por Sorolla.

El Museo Nacional del Prado rinde homenaje a Joaquín Sorolla a través de sus retratos

De izquierda a derecha: Javier Barón, Jefe de Pintura del siglo XIX del Museo Nacional del Prado; Javier Solana, Presidente del Real Patronato del Museo Nacional del Prado; José García-Velasco, Presidente de la Fundación Francisco Giner de los Ríos en la Institución de Libre Enseñanza y Miguel Falomir, Director del Museo Nacional del Prado. Foto © Museo Nacional del Prado.

Museo Nacional del Prado, 27 de diciembre de 2022. La dedicación de Joaquín Sorolla (1863-1923) al retrato fue sobresaliente tanto por el número de obras que pintó como por su calidad. Su trabajo en su primera juventud con el fotógrafo Antonio García le familiarizó con la captación atenta del natural, aspecto que tuvo presente en su pintura ya en los años de su formación. Su desempeño le convirtió, en la primera década del siglo XX, en uno de los grandes retratistas de referencia internacional.

El Museo Nacional del Prado rinde homenaje a Joaquín Sorolla a través de sus retratos

Giner de los Ríos Joaquín Sorolla Préstamo de la Institución de Libre Enseñanza.

El Museo Nacional del Prado rinde homenaje a Joaquín Sorolla a través de sus retratos

Mercedes Mendeville, condesa de San Félix Joaquín Sorolla 1906 Madrid, Museo Nacional del Prado

De las 23 pinturas del artista conservadas por el Museo del Prado 18 son retratos, incluidos los dos adquiridos en 2022: Martín Rico (sala 62 A) y Manuel Bartolomé Cossío, que se presenta ahora en el Museo. Buena parte de ellos, los menos conocidos, pues no están habitualmente en sala, se incluyen ahora en esta exposición, que conmemora el centenario del fallecimiento del artista. Su visión se completa con las obras que forman parte de la colección permanente en la sala 60 A, aneja a esta, que se enriquece con el préstamo de la Institución de Libre Enseñanza del retrato de Francisco Giner de los Ríos, y en la 62 A, que reúne los retratos de artistas del siglo XIX, entre ellos cuatro pintados por Sorolla.

El Museo Nacional del Prado rinde homenaje a Joaquín Sorolla a través de sus retratos

El doctor Francisco Rodríguez Sandoval Joaquín Sorolla 1906 Madrid, Museo Nacional del Prado

La contribución de Sorolla a este género revela, a menudo, su inspiración en los maestros antiguos, señaladamente Velázquez, según pudo verse en la exposición que organizó el Prado en 2009. Se percibe en los negros y grises de El pintor Aureliano Beruete y de María Teresa Moret, quizá sus dos mejores retratos, así como en la ambigüedad espacial del primero. De modo más explícito, la referencia velazqueña aparece en María Figueroa, vestida de menina y en La actriz María Guerrero como La dama boba. En el retrato de Cossío, realizado el mismo año en que este publicó su libro sobre el Greco, el pintor rindió homenaje al cretense, a quien había estudiado, lo mismo que a Velázquez, en el Museo del Prado. En esta obra supo captar los rasgos fisionómicos esenciales del modelo, a lo que agregó una sutil interpretación de su personalidad intelectual.

El Museo Nacional del Prado rinde homenaje a Joaquín Sorolla a través de sus retratos

Jacinto Felipe Picón y Pardiñas Joaquín Sorolla 1904 Madrid, Museo Nacional del Prado

Lo propio ocurre en muchos de sus retratos masculinos, en los que representó a destacados personajes de la cultura de su tiempo, no pocos vinculados con la Institución Libre de Enseñanza, con los que tuvo trato amistoso. Entre ellos figuran escritores (Rafael Altamira, Jacinto Felipe Picón y Pardiñas, Aureliano de Beruete hijo, Cossío), médicos (Francisco Rodríguez de Sandoval, Joaquín Decref) y pintores (Martín Rico, cuyo retrato ha sido adquirido por el Prado este mismo año, Aureliano de Beruete, Juan Espina, Antonio Gomar). En algunos cuadros (Jacinto Felipe Picón y Pardiñas, El pintor Antonio Gomar, El doctor Joaquín Decref) Sorolla utilizó un formato horizontal que le permitió ofrecer encuadres novedosos y dar un movimiento especial a las figuras, a menudo inclinadas hacia un lado.

En el retrato femenino Sorolla desplegó una especial sensualidad (Mercedes Mendeville) y un fastuoso colorido (María de los Ángeles Beruete y Moret). Ambas obras, ejemplos de efigies de damas del gran mundo, denotan la atención del artista a los requerimientos del género. Ante otras damas distinguidas como María Teresa Moret, amiga del pintor y su familia, o Ella J. Seligmann, esposa de un conocido anticuario, pudo ofrecer una interpretación elegante y certera, con una fina sensibilidad cromática de negros, grises y blancos. También destacó como retratista de niños, según atestiguan las efigies de Jaime García Banús y María Figueroa.

La facilidad para la captación del natural en un instante, en el que el retratado se hace presente con una intensa sensación de realidad, es característica de todas estas obras. En ello Sorolla no solo era fiel a su visión naturalista sino también a la profunda percepción de lo individual propia de la gran tradición pictórica española.

Fecha de inicio: 27-12-2022

Fecha fín: 19-03-2023

Lugar: museo sorolla y museo del prado
madrid

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