“Regresar a mí” es el nuevo tema del artista zaragozano, que sirve de adelanto para el que será su cuarto álbum, a publicar en otoño de este año: “El chico más solitario del mundo”.
Madrid, 3 de abril de 2020. Lionware es el nombre de uno de los mayores talentos de la escena underground de la música urbana nacional. Con solo 25 años, el zaragozano Lucas Bernal lleva desde 2016 trabajando en un cancionero que ha construido con mimo a lo largo de tres discos: “No todo me duele” (2016), “No quiero matar a nadie” (2017) y “Mis planes sin verte” (2019).
El “Lion” en su alias viene de su amor por el reggae (patente en muchos fraseos), mientras que el “ware” lo hace de su otro trabajo, como programador de robots, de software aplicado a la industria, Una dualidad que tiene reflejo en su propuesta musical, con unas letras apasionadas a la vez que delicadas, y con algo de esos mecanismos sistematizados con los que trabaja en su día a día aplicado a sus producciones, mimando las bases de las que él mismo se encarga en la mayoría de sus temas, y en las que es evidente su gusto por la electrónica más refinada, dando pasos adelante en cada una de esas producciones, evolucionando y experimentando a nivel lírico y musical, sin prisas, alejado de las estridencias y la exposición habituales del género.
Lionware ha ido profesionalizando su propuesta a la vez que iban creciendo sus fans, público que llega a su música de una manera natural, miles de seguidores en redes, pero sobre todo llenando sus conciertos, más fans de su música que de sus historias y sus filtros en Instagram.
Lionware presenta ahora “Regresar a mí”, tema que formará parte de su nuevo álbum a publicar en otoño de este año: “El chico más solitario del mundo”. Una pieza tan sencilla como adictiva, una declaración de amor que es a la vez brillante y melancólica, una explosión de emociones, de como se puede sentir agitación y el vértigo de lo nuevo a la vez que la experiencia nos hace sentir desconfiados. En palabras de Lionware: “cuando digo lo de ¿cómo regresar a mí? quiero expresar que el tiempo nos cambia y es imposible seguir siendo el mismo con el paso de nuevas circunstancias en la vida. Ahora soy Lionaware para mucha gente, antes solo era Lionware para mí en mi habitación de forma secreta”. En esta ocasión la base es del productor belga El G, y la mezcla y el mastering son de Naturale, colaborador habitual del zaragozano. El lanzamiento se acompaña de una pieza audiovisual a cargo de NanoKalataa.
Lionware posee una extraordinaria habilidad para llenar de valor sentimental lo cotidiano, una mezcla única en la escena de talento, creatividad y timidez, si además lo acompaña todo de un envoltorio musical íntimo y exquisito, la fórmula es ganadora. Lo suyo no es trap, no es rap, ni reggae, ni rock, ni pop, solo es música, pero una música capaz de poner a bailar a esos robots para los que diseña programas, y quien sabe si incluso de hacerles derramar alguna lágrima.
