El fin de semana del 30 de noviembre es una buena ocasión para viajar a Funchal y asistir al alumbrado de las luces navideñas. Si visitas Madeira en el puente de la Constitución, podrás disfrutar de los mercadillos de la Avenida Arriaga, con los que poder sentir la Navidad por adelantado.
Fotografía: Madiera Promotion Bureau
Poco queda ya para que acabe 2019. Pero si antes tienes unos días libres, un fin de semana largo o quieres aprovechar los festivos y puentes que se avecinan, te proponemos una escapada a un paraíso como Madeira, donde huir de las bajas temperaturas y descubrir una experiencia de verdadera desconexión.
Además, las islas han ofrecido recientemente algunos eventos que han supuesto un plus a la hora de disfrutar de este destino. Por ejemplo, hasta el pasado sábado, Madeira acogió la Ruta de las Estrellas, un festival de alta gastronomía que unió a más de cien chefs procedentes de todo el mundo. El restaurante madeirense Il Gallo D’Oro, con dos estrellas Michelin, y su chef, Benoît Sinthon, fueron los anfitriones en esta edición de 2019 con un menú degustación preparado conjuntamente por los profesionales invitados. Además, el festival incluyó en su programa showcookings, workshops, degustaciones de vino y visitas guiadas con el fin de conocer los productos gastronómicos locales.
Más tarde, concretamente desde el 1 de diciembre, la capital de Madeira se llena de luces y de decoración de Navidad. El fin de semana del 30 de noviembre es una buena ocasión para viajar a Funchal y asistir al alumbrado de las luces navideñas. O en el puente de la Constitución, del 5 al 8 de diciembre, ya que para ese entonces también estarán abiertos los mercadillos de la Avenida Arriaga, con los que poder sentir una Navidad por adelantado.
El archipiélago se posiciona como un destino ideal para cualquier período vacacional y se adapta a las necesidades tanto de quien viaja dos días como de quien programa una estancia de veinte. Parques naturales con bosques de laurisilva únicos en el mundo, una amplia oferta de actividades marinas y una cultura lugareña y cosmopolita a la par son algunos de los descubrimientos que los turistas encuentran aquí.
Pero, ante todo, Madeira es un paraíso exótico y diferente en el que las temperaturas no bajan de los 15 grados. La mejor opción para escapar del frío invernal y desconectar de la rutina diaria no solo por estar rodeado de naturaleza virgen, sino también por lo diferente de la cultura y la gastronomía de estas islas.
