La nueva exposición del Museo Casa Lis combina arte y tecnología para que los visitantes disfruten el movimiento y sonido original de los autómatas. El Museo ha creado gemelos digitales de las ingeniosas piezas que permiten verlos en movimiento preservando los autómatas originales. Los visitantes pueden elegir entre la visita analógica y tradicional o la experiencia digital con tablet y auriculares para ver los gemelos digitales.
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Salamanca 23 de diciembre de 2025. El Museo Art Nouveau y Art Déco – Casa Lis de Salamanca ha abierto al público hoy, lunes 22 de diciembre 2025, la exposición «Autómatas. De la cuerda al código», muestra que invita al visitante a descubrir un universo donde arte, mecánica, artesanía y tecnología se unen en una sola pieza: el autómata. Esta exposición combina la posibilidad de descubrir y admirar la historia y contexto de los autómatas del Museo Casa Lis a través de dos tipos de visita: una analógica y tradicional, con las piezas originales y gráficas explicativas en sala, y una innovadora experiencia, que permite ver y escuchar a los gemelos digitales de los autómatas con sus movimientos y cajas de músicas originales recreados virtualmente. Para ello, el museo facilitará a quienes así lo deseen una tablet y auriculares con los que podrá escanear códigos QR para ver y escuchar a los gemelos digitales y acceder a información extra que complementa las gráficas de sala, así como un juego interactivo, «Dale cuerda al código«, ubicado en la última sala de la exposición..
Desde sus orígenes, el ser humano ha soñado con lo imposible: dar vida a lo inerte. Mucho antes de la era digital, ingenieros e inventores egipcios idearon figuras capaces de moverse, tocar música e imitar gestos humanos. En la Antigua Grecia, los sabios de Alejandría construían esculturas impulsadas mediante agua hirviendo y vapor. Más tarde, en el Renacimiento, estos artefactos reaparecieron como puros símbolos del poder científico de la razón. Sin embargo, fue en los siglos XIX y XX cuando los denominados autómatas alcanzaron su mayor apogeo. En una Europa fascinada por el progreso, estos juguetes mecánicos se convirtieron en los protagonistas de los salones burgueses, ya que más que artes decorativas, eran símbolos de la innovación tecnológica y de una sociedad que confiaba en que la máquina podría imitar a la vida de una forma más bella y opulenta.
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Los talleres de Vichy, Lambert, Roullet & Decamps o Jumeau, reunían a los mejores relojeros, escultores, pintores y modistas. Cada autómata requería semanas de trabajo: los rostros se modelaban en porcelana biscuit, los trajes se cosían a mano y los mecanismos se ensamblaban con precisión milimétrica. En su interior, un sistema de levas y cilindros musicales sincronizaba los gestos y la música, creando la ilusión perfecta mediante los autómatas.
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Sus temáticas reflejaban los intereses y el espíritu de la época. Las bailarinas y músicos simbolizaban la elegancia y el gusto por las artes, los payasos y acróbatas del circo aportaban humor y fantasía, mientras los personajes folclóricos evocaban a la vida cotidiana y sus tradiciones. También abundaban las figuras femeninas idealizadas bajo la mirada de una sociedad decimonónica que encontraba en la delicadeza y la quietud la esencia del refinamiento..

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Los autómatas de la colección del Museo Art Nouveau y Art Déco – Casa Lis fueron, en su origen, símbolos de innovación tecnológica. Unieron ciencia, arte y espectáculo como pocas creaciones lo habían hecho antes. Y lo siguen haciendo. No obstante, encierran en su propia naturaleza una paradoja: nacieron para moverse, para crear la ilusión de vida a partir del ingenio de sus engranajes ocultos y la precisión de sus cajas de música, pero el paso del tiempo y la necesidad de garantizar su conservación exigen que sus delicados mecanismos permanezcan en reposo. La exposición «Autómatas. De la cuerda al código» recupera este legado y lo proyecta hacia el futuro superando esta paradoja con una herramienta tan revolucionaria como lo fueron los propios autómatas en su día: la creación de gemelos digitales.
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Gracias a un complejo y riguroso proceso de digitalización que aúna escaneado 3D con láser; sistemas multicámara sincronizados; fotogrametría; captura volumétrica 4D y animación se ha logrado preservar la geometría, textura y, sobre todo, los gestos y músicas originales de estas singulares piezas. De este modo, cada autómata ha recuperado virtualmente su esencia: el movimiento y la música. Si antaño era necesaria una llave manual para activar sus complejos mecanismos, hoy esa llave ha sido sustituida por el código digital que permite que recobren sus movimientos y músicas originales, su vida, tantas veces como se desee, asegurando su perdurabilidad para el futuro sin poner en peligro las piezas centenarias. Así, los gemelos digitales permiten que los autómatas sigan vivos más allá del paso del tiempo preservando su memoria y su valor patrimonial.

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De este modo, la tecnología del siglo XXI se suma a la de finales del siglo XIX y principios del XX para brindar al visitante una experiencia única: presenciar el instante mágico en que un autómata renace y comienza a moverse al compás de su caja de música. Gracias a los gemelos digitales, ya es posible asistir hoy al mismo espectáculo que se disfrutaba en los hogares de la burguesía de hace más de cien años. Y lo será dentro de otros cien, preservando el estado original de los autómatas del Museo Art Nouveau y Art Déco – Casa Lis.
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La experiencia digital podrá realizarse en el Museo Casa Lis con un suplemento de 2 euros sobre las tarifas generales con los horarios indicados en la web oficial del Museo. Durante Nochebuena (24 de diciembre), el 28 de diciembre y Nochevieja (31 diciembre) el Museo abrirá de 11:00 a 15:00 horas y permanecerá cerrado el 25 de diciembre, el 1 y el 6 de enero de 2026.





