León acoge las XI Jornadas Españolas de Presas

“La inversión en mantenimiento y construcción de presas es fundamental para el desarrollo económico del país”

León, 29 de junio de 2018. “Gracias a las presas tenemos el nivel de vida del resto de Europa”, con esta rotunda afirmación inauguró el presidente de SPANCOLD (Comité Nacional de Grandes Presas), las XI Jornadas Españolas de Presas, que reúnen a especialistas de toda España y que se celebran en las León hasta el 29 de junio.

Dijo también que estas jornadas pretenden ser un punto de encuentro de todos los profesionales del sector y destacó la importancia de la inversión en mantenimiento y construcción de nuevas presas para aprovechar todas las posibilidades que estas infraestructuras generan. Para finalizar definió SPANCOLD como un espacio de pensamiento en un ambiente multidisciplinar y a la vanguardia, que además imparte el Máster Internacional en Explotación y Seguridad de Presas y Balsas, único en el mundo por ser el más completo y que ya ha formado a más de 300 personas de 11 países en las 8 ediciones que lleva en funcionamiento.

El acto de inauguración contó con la intervención de Eduardo Cabanillas, Secretario General de Agricultura y Ganadería de la Junta de Castilla y León, el cual explicó los beneficios que los embalses aportan a los cultivos “el 50% del territorio está dedicado a la agricultura y de este el 12% que es de regadío genera el 35% de la producción agraria” también destacó los beneficios en términos de población, “en las zonas regadas hay tres veces más población y un 80% más de jóvenes”. “Necesitamos más inversión, más tecnología para regulaciones más pequeñas, más rápidas y más flexibles para regular el agua en más de una campaña y soluciones de reservas de agua para poder desarrollar mas actividad. El agua es riqueza”, concluyó.

El Alcalde de León, Antonio Silván, “La gestión del agua es un compromiso y una prioridad para todos, tenemos que adecuar las infraestructuras para que el 30% de las perdidas no se produzcan y aplicar el Plan Nacional de Actualización de Regadíos.”

El Presidente de la Confederación Hidrográfica del Duero, Juan Ignacio Diego, “La infraestructura hidráulica ha cambiado el futuro de esta provincia, estamos metidos en la modernización de los sistemas para ser aun más competitivos”. “Las presas son la mejor manera de asentar a la población en un territorio gracias al regadío.” En la charla posterior afirmó: “Es necesaria una planificación rigurosa para satisfacer las necesidades de la sociedad en el contexto incierto que nos propone el cambio climático”

Además intervinieron Daniel Sanz, Subdirector de infraestructuras del Ministerio Transición Ecológica, que agradeció a Spancold la organización de estas jornadas, Francisco Castaños, Vicepresidente de la Diputación de León, “debemos seguir trabajando en mejorar la efectividad de la gestión de agua” , El Vicepresidente del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos, José Polimón, y el presidente de la Asociación de Ingenieros de Caminos, Vicente Esteban Chapapría, que felicitaron a Spancold y les animaron a seguir trabajando por el futuro de la profesión en este campo.

Durante el resto de la jornada se presentaron y debatieron varios proyectos técnicos que trataron temas como la sequía y planificación de recursos hidráulicos, la defensa frente a inundaciones, la energía hidroeléctrica y la recuperación ambiental de ecosistemas fluviales. Además se presentaron La Nuevas Normas Técnicas de Seguridad de Presas (NTSP) y el modelo argentino de gestión de presas.

CCRL se opone a la construcción de nuevos embalses en el País Leonés planteada en las ‘XI Jornadas Españolas de Presas’

Desde el CCRL se considera que en la Región Leonesa, que alberga con sus presas el 85% de la capacidad de embalsado de la autonomía, no son necesarios nuevos embalses

Ante una de las conclusiones realizadas en la primera de las ‘XI Jornadas Españolas de Presas’, que se celebran en la ciudad de León, en la que se ha manifestado que “es necesario hacer más embalses para mejorar la calidad de vida de la comunidad”, desde el Colectivo Ciudadanos del Reino de León (CCRL) han querido salir al paso para manifestar el “estupor” provocado por dichas conclusiones.

Así, desde el CCRL se ha señalado que “somos incapaces de entender la conclusión de que los grandes embalses mejoren la calidad de vida de los ciudadanos, habida cuenta de que el País Leonés es uno de los territorios con más agua embalsada de la península, y al mismo tiempo es el que acarrea la mayor pérdida de población de toda Europa occidental, poseyendo asimismo la peor tasa de actividad industrial de España.”

Por ello, han indicado que “creíamos que ese afán de construir embalses ad infinitum era un pensamiento anticuado y desfasado que había quedado atrás con el franquismo, si bien la desaparición bajo un embalse de Riaño y varios pueblos de su comarca en los ochenta nos alertaron de que no estaba aparcada esa idea, y las múltiples intentonas de la construcción del embase de Omaña a finales de esa década terminaron de corroborarlo, al igual que lo hacen actualmente los proyectos de embalses en la Ribera del Órbigo, que pondrían en peligro la continuidad del cultivo del lúpulo”.

Por ello, desde colectivo leonesista se lamentan de que “ahora, con la Región Leonesa más debilitada pese a estar hiperpoblada de embalses, y tras haber perdido 150.000 habitantes en periodo autonómico, vemos que desde altas instancias siguen pretendiendo convertir a nuestra tierra en la mayor reserva de agua gratuita de España, sin que nuestros ciudadanos reciban nada a cambio, y con las empresas encargadas de gestionar nuestros embalses teniendo sus sedes en Bilbao o Madrid. Es decir, un sistema colonial en toda regla”.

Y es que, han querido recordar que es precisamente la Región Leonesa, que posee el 85% de la capacidad de embalsado de toda la autonomía, la que aglutina el grueso de la despoblación de la comunidad autónoma.

Por ello, desde el CCRL dicen desconocer “si con ‘mejorar la vida de las personas’ se refieren a realizar desalojos de pueblos enteros mediante la fuerza y el miedo como en Riaño, Vegamián o Luna y dejar sin casas y sin tierras que cultivar o en las que pastar su ganado, a numerosas personas, que se ven forzadas a abandonar sus hogares para vivir a cientos de kilómetros en las grandes urbes”.

Asimismo, han querido “recordar que todas las comarcas del País Leonés que poseen embalses están sufriendo una permanente caída poblacional, con la consecuente pérdida de servicios básicos de educación, sanidad o administración desde el cierre de sus respectivas presas”.

Por otro lado, desde el CCRL han señalado que “no podemos olvidarnos de consecuencias mucho más graves que hemos sufrido en la Región Leonesa en algunos casos derivadas de la construcción de embalses, como la terrible desgracia que sufrió Ribadelago, donde centenar y medio de personas fallecieron al reventar la presa de Vega de Tera, que había sido construida de forma deficiente, siendo una de las mayores tragedias del siglo XX en España”.

Asimismo, desde este colectivo se ha indicado que “los mejores valles de la montaña leonesa están sepultados por embalses que no han hecho sino contribuir a la sangría poblacional y el aislamiento de las comarcas montañesas, al mismo tiempo que tampoco han servido para asentar población en las zonas de ribera y páramos, que en principio iban a ser los grandes beneficiarios de tales obras hidráulicas”.

Por otro lado, para el Colectivo Ciudadanos del Reino de León, es “indispensable recordar que también existen grandes expertos en gestión hidráulica y ambiental que no abogan por la construcción de grandes o medianos embalses, sino por una mejora en la gestión de agua a través del ahorro, el cuidado de los bosques, los pequeños arroyos y los acuíferos”. Y es que, continúan, “diversos estudios han demostrado que los embalses deterioran el suelo, haciendo que el río pierda propiedades fertilizantes presa abajo, a la par que destruyen espacios naturales que sí son verdaderas fuentes de vida.

Por todo ello, desde el CCRL se solicita a los responsables de las confederaciones hidrográficas que afectan a León, Salamanca y Zamora, “que aprendan de otros países europeos en la forma de gestionar el agua, y no sean tan ‘cafres’ de pretender progresar a base de destruir pueblos, valles y ríos”, exhortándoles a que “aprendan a hacer bien su trabajo, y dejen a un lado las obras faraónicas, que por mucho que puedan acarrear mordidas para algún que otro ‘amiguete’, tendrían unas consecuencias mucho peores para nuestros valles, ríos, biodiversidad y pueblos”.

Y es que, sentencian desde este colectivo, “el País Leonés ya ha pagado precio suficiente en materia de embalses, con casi cuarenta pueblos sepultados bajo las aguas y la tragedia de Ribadelago. Si a ello le sumamos que exportamos en torno al 80% de la energía hidroeléctrica que producimos, la conclusión se nos antoja clara. No necesitamos más embalses. Si acaso optimizar los que ya tenemos”.